Por: Máximo Ortega.
Un día, en el interior de una
esfera, un extraterrestre llega a la Tierra, a Manhattan, con la misión de
advertir a los líderes del mundo de que los humanos han abusado del planeta, de
que han cometido muchos errores, de que siguen matándose entre sí, y que por
tanto les llegó la hora del juicio final (no se incluyen las especies animales,
vegetales…). Pero, para suerte nuestra, el extraterrestre (interpretado por
Keannu Reeves, a quien lo conocimos en películas “Un paseo por las nubes”, o la
saga de “Matrix”) sensibilizado por la ternura de un niño, desobedece las
órdenes de sus jefes de aquella lejana civilización alienígena, y nos perdona
la vida, evita que la Tierra se destruya y obviamente, nos da a los terrícolas
una nueva oportunidad para que cambiemos. Esa vendría a ser, grosso modo, la
trama de la película (remake) EL DIA QUE LA TIERRA SE DETUVO que se estrenó
hace pocos años… Pero, ¿a qué viene toda esto?, se preguntarán. Pues a tres
cosas. La primera a que en la medida de lo posible vean esta película, me lo
agradecerán. Lógicamente, tendrán que comprar el CD (lamentablemente,
pirateado) en cualquier tienda de videos… Segundo, a que de vez en cuando leamos
un poco de crítica relacionada con el cine de ciencia ficción, apocalíptico.
Este género no es nuevo. Recordarán algunos las cintas “2001 odisea en el
espacio”, “El planeta de los simios”, “El séptimo sello” “Armageddon”, etc.
Pero la cinta, materia de este artículo, y con lo cual toco el punto tres,
aparte de estar bien estructurada, es novedosa por cuanto aflora eficaces
revelaciones bíblicas, al espectador lo hace filosofar, y lo que es más, nos
hace tomar conciencia de que debemos cambiar en todos los sentidos: ser
solidarios, no ser envidiosos; desterrar el racismo y el machismo; ser justos;
dejar de ser mentirosos y codiciosos, etcétera. Definitivamente, todos estamos
a tiempo de cambiar, si no queremos que ocurra algo parecido a lo de la película.
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