Por Máximo
Ortega
Si
usted es dueño de un vehículo que funciona a gasolina, diesel o gas, es hora de
que vaya pensando seriamente en cómo deshacerse lo más pronto posible de éste. Bueno, no tan rápido. Quizá en unos dos o tres años… ¿Y por qué tendría
que deshacerme de mi cacharrito?, se preguntará. Pues, por lo
siguiente: Al parecer, la mayoría de jefes de estado de las grandes potencias mundiales, ahora sí, están tomando conciencia de que se debe respetar a la naturaleza si no queremos que se destruya el planeta. En los foros mundiales, que ahora se realizan con más frecuencia, ya se habla seriamente de delinear urgentes políticas medioambientalistas (ecologistas) para luchar contra el calentamiento global (cambio climático); además de reducir su dependencia energética de los países petroleros; pero también,
que pondrán más empeño en perfeccionar vehículos que no consuman
combustible tradicional (en pocos años se masificará el uso, por ejemplo, de automóviles
que funcionarán con energías alternativas: eléctrica, eólica, biológica). Así que, ¡adiós petróleo salvaje!, tienes los años contados (décadas atrás le pasó lo mismo al carbón de
piedra que servía para mover, entre otros, a los trenes).
Estas
políticas medioambientalistas, aparte de que se proponen disminuir la dependencia energética tradicional de dichas potencias, aspira lograr reducir los conflictos en los
países petroleros, en especial de Oriente Medio (esto es muy difícil), y lo que es más, aspira evitar que la OPEP manejé a su antojo los
precios del crudo (lo cual, al parecer, ya lo ha logrado). Obviamente, si en el futuro no va ha haber grandes demandas de
petróleo, como hasta hace poco ocurría, éste pasaría a tercer o cuarto plano. Ya no hablaríamos de oro negro...
Para
finalizar, la naturaleza en algo se salvaría, la mayoría de
países desarrollados se harían más ricos, green peace y otros grupos
ecologistas ganarían presencia mundial, Barack Obama ganaría más protagonismo del que ya tiene, etc. Pero, y ¿qué pasará con países como el nuestro, cuyas economías
lamentablemente dependen del petróleo?... La respuesta es materia de otro
análisis...
Así que, lo de vender su carrito en poco tiempo y
cambiarlo por un Mercedes C350 híbrido, o un Tesla S eléctrico, no es broma. En mi caso, prefiero caminar...